El éxito del III Festival de Contenidos Digitales Carballo Interplay consolida las bases para la celebración de una cuarta edición, “que seguirá intentando llegar cada vez más lejos y atraer a más gente”, en palabras de su directora, Sonia Méndez. “La asistencia de público ha sido todo un éxito, tanto en las actividades como a través de las redes”, afirma Méndez, “en las que Carballo se convirtió durante tres días en sinónimo de cultura y creatividad digital global”.
El CIP se ha convertido en una cita imprescindible para el sector audiovisual más creativo e innovador. Ya es una referencia para los creadores de contenidos digitales del Estado y con cada edición adquiere más relevancia internacional, convirtiéndose en un punto de encuentro en el que conocerse y establecer sinergias de las que surgen nuevos proyectos conjuntos. Buen ejemplo de esto es la cada vez más numerosa asistencia de creadores internacionales y estatales al certamen, de la que nacen iniciativas como la colaboración del gallego Enrique Lojo con los andaluces Entertainment o el proyecto Peter Brandon, de los Porco Bravú y el humorista Pedro Brandariz, que verá la luz e los próximos meses.
Uno de los éxitos más destacables de esta tercera edición ha sido el de la convocatoria de proyectos de webserie en gallego, en la que resultó vencedora a mencionada Peter Brandon y de la que saldrán por lo menos tres webseries más, las finalistas Dowson y Pillei, de Víctor Grande; A espiral de Fibonacci, de Alejandra Piot, Paula Andrade e Iria Rodríguez; y Lucas, de Oscar Pardo. También la webserie Muerte al youtuber, nacida al amparo del programa formativo FormaCIP, ha adquirido vida propia y comienza ahora su periplo por otros festivales de webseries. El Festival adquiere, así, también, el papel de catalizador de la creatividad digital gallega.
Otro de los objetivos que la organización del Carballo Interplay considera cumplidos en esta tercera edición es el de la creación de nuevos públicos para la cultura digital gallega y en gallego. La asistencia de niños y niñas a las actividades formativas de esta edición y la participación de adolescentes en los encuentros con youtubers, videobloggers, praksters y viners gallegos fue todo un éxito, tanto desde el punto de vista cuantitativo como desde el cualitativo, y da buena cuenta de las enormes posibilidades didácticas que ofrece el Festival. “Se trata”, recuerda Sonia Méndez, “de actividades formativas con un amplio espacio para la diversión, lo que hace que la gente joven se implique y participe muy activamente, lo que resulta muy satisfactorio para ellos, para los docentes y para nosotros”.
La importancia de la libertad y de la imaginación
El discurso de Sonia Méndez en la Gala de clausura del III Carballo Interplay estuvo protagonizado por Ada Lovelace, una matemática y escritora británica conocida principalmente por su trabajo sobre la máquina calculadora mecánica de uso general o “máquina analítica”. Entre sus notas se encuentra lo que se reconoce hoy como el primero algoritmo destinado a ser procesado por una máquina. Como consecuencia, la describen a menudo como la primera programadora de ordenadores de la historia.
“Mientras que otros se centraron únicamente en la capacidad de los ordenadores para hacer simples cálculos numéricos”, recordó Méndez, “Ada fue más allá: en 1843 habló de un mundo en el que las máquinas programables serían esenciales para el progreso de la ciencia y de la tecnología e incluso declaró que estas máquinas podrían llegar a ejecutar música, componer sinfonías o complejos diseños gráficos”. “No fue la precursora de los codificadores y hackers de hoy en día”, aclaró, “pero sí una pionera que fue capaz de imaginar como la siguiente generación tecnológica cambiaría el mundo y lo hizo combinando su conocimiento matemático con una vívida y “poética” imaginación. En resumen, Ada Lovelace imaginó en el siglo XIX lo que estamos viviendo en el XXI”.
La figura de Ada Lovelace le permitió a la directora del Carballo Interplay defender la importancia de la imaginación y de la libertad creativa, que están en la base misma de Internet y que son imprescindibles, también, para desarrollar un proyecto como el CIP. “Hace falta dejar espacios para la imaginación”, recordó Méndez, “y en Carballo llevan tres años ofreciéndonos su espacio y su confianza para dejar volar la nuestra”. La directora del certamen agradeció, así, la “libertad” y el “apoyo” prestados por el Ayuntamiento de Carballo y por la Diputación de A Coruña, así como por el resto de patrocinadores.
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